Los vuelos de deportación financiados por Estados Unidos que implementó el gobierno panameño desde julio y las condiciones del clima incidieron en la cantidad de personas que prefirieron cruzar por Darién para llegar al norte. La ruta marítima por Nicaragua ha tomado más auge
Roger Mojica.
Hasta mediados de noviembre de este año las autoridades contaron 295 mil migrantes que emplearon el cordón humanitario vigilado por el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) en la selva del Darién que divide a Panamá y Colombia. El número representa una disminución de migrantes por la ruta en comparación al 2023, cuando se registró el paso de 520 mil personas en su camino a Estados Unidos.