El Sur se monta en la ola del desarrollo

El auge de las economías en desarrollo ha impactado significativamente en el progreso del desarrollo humano.

El Informe anual que evalúa el Índice de Desarrollo Humano que emite el PNUD arrojó un significativo avance en el sur del planeta. "De una muestra de 107 países en desarrollo durante 1990-2010, cerca del 87% puede considerarse integrado mundialmente; su relación comercio-producción aumentó, mantienen sociedades comerciales importantes" indica el texto que cada año revela esta institución.

Un factor relevante en esta actividad económica que repercute en la calidad de vida de su población se atribuye a la conectividad que tienen los países en desarrollo con el mundo y entre sí.

El Internet forma parte de estas herramientas fundamentales que contribuyen a la expansión. En la década del 2000-10 se registró un crecimiento del número de usuarios de Internet en el mundo superior a un 30%. Por consiguiente, esta forma de conectividad impactó favorablemente en las economías pujantes, al grado que el intercambio comercial internacional alcanzó un aumento promedio de la relación comercio-producción cercano a 13% por encima de los países en desarrollo con menores avances en el IDH.

El desarrollo de estos países, en su mayor parte ubicados en el Sur, impactó positivamente en la educación, la salud e ingresos según las mediciones del Índice de Desarrollo Humano efectuado por el Programa de las Naciones Unidas para el desarrollo Humano.

De acuerdo con las estimaciones actuales las economías de mayor crecimiento en la próxima década serán Brasil, China e India, incluso con mayor expansión que la potencia norteamericana.

¿La razón? PNUD lo atribuye a las nuevas asociaciones de comercio y tecnología.

Sin embargo, es necesario resaltar que éste crecimiento económico no siempre se traduce en el bienestar de la población, especialmente de las áreas mas pobres.

Las valoraciones toman en cuenta los programas o políticas que se realicen a favor de esta población como por ejemplo, enfocar inversiones significativas en educación, nutrición, salud y empleo.

Estas medidas, básicas para lograr una mejor preparación y por ende un empleo mejor remunerado, son catalizadores para alcanzar una mejor calidad de vida y un progreso sostenido, afirma el documento.

Son cuatro áreas específicas donde se enfocan los desafíos de la humanidad: mejora de la igualdad, incluido el de género; dotación de voz y participación ciudadana, confrontación de presiones ambientales y manejo del cambio demográfico.

El informe engloba los países del Sur como una de las regiones de mayor desarrollo y expansión, y mucho lo atribuye a la cooperación e integración regional. Se trata de políticas sociales innovadoras con socios relevantes en la contribución al desarrollo e inversiones para otros países en crecimiento.

Un fenómeno al que el PNUD denomina el "ascenso del Sur", puesto que a pesar de que la mayoría de los países en desarrollo han avanzado, los del Sur obtuvieron incrementos en el valor del IDH entre 1990-2012 con mejores pronósticos en este periodo de tiempo.

Algunos ejemplos de países en los que se notan estos progresos según el texto son; Brasil, China, India, Indonesia, México, Sudáfrica y Turquía.

Esto impacta por ejemplo en la creación de nuevas riquezas, y algo mas impactante; por primera vez en 150 años la producción de China, India y Brasil son sinónimo al PIB combinado de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Reino Unido y Estados Unidos. Lo que lleva a los analistas a concluir que se produjo un reequilibrio del poder económico mundial.

La proporción del comercio Sur-Sur dentro del comercio de mercancías a nivel mundial se triplicó entre 1980-2011, mientras que el comercio Norte- norte se redujo. No obstante, no todos los países del Sur crecen con la misma velocidad.

El comercio ha sido un factor fundamental en esta materia, y se hace mas notable que las naciones sin salida al mar o que se hallan muy lejos de los mercados mundiales. Sin embargo, han recibido de las economías mas beligerantes un crecimiento positivo indirecto, y en cierta forma estos beneficios han compensado la caída en la demanda de las economías emergentes.