Panamá accederá a fondo disponible de organismos internacionales

Se trata de una línea de crédito por $50 mil millones para países emergentes que puso a disposición el Fondo Monetario Internacional para combatir el golpe económico de Covid-19. La banca panameña masificará la modificación de préstamos a sus clientes, según la SuperBancos

Panamá accederá a la línea de crédito del Fondo Monetario Internacional (FMI) de $50 mil millones que ha puesto a disposición para los países emergentes que requieran capital para afrontar la crisis del coronavirus. Así lo ha confirmado una fuente del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), quien indicó que la mayor parte de este dinero estará libre de intereses y disponible de manera inmediata.

La fuente aún no especificó el monto solicitado por Panamá al FMI, dinero que planean emplear con cautela, pues “mucha gente querrá pescar en río revuelto y debemos cuidar las finanzas del Estado”, advirtió.

El gobierno trabaja en varias proyecciones del impacto del virus, y aunque se percibe una gran mesura por parte de sus voceros económicos, “el gobierno está preparado hasta para el peor escenario”. Por ahora no se percibe un panorama similar al del Francia, por ejemplo, cuyo gobierno asumió los créditos y suspendió el pago de alquileres, impuestos y recibos de servicios básicos. Hay alivio de aproximadamente un 5% en la factura de energética, y la Autoridad de los Servicios Públicos analiza algunas otras opciones.

La mayor parte de los países han hecho frente al virus inyectando dinero a la economía, lo hará Panamá también, pero aún no se ha revelado la estrategia o los sectores que se beneficiarán con el apoyo económico del Estado.

PERIODO DE GRACIA
Gracias a la flexibilidad que otorgó la Superintendencia de Bancos a la banca local para el uso de provisiones específicas que totalizan $1250 millones, los bancos podrían ofrecer varias alternativas a los deudores como: periodos de gracia en el pago de hipotecas a tres o seis meses o según lo que se negocie con los clientes; ajustes en la tasa de interés; modificación en el plazo del pago de la hipoteca o disminuir el monto del pago de cuotas, según sea el caso. Estas alternativas oxigenan y alivian el nerviosismo latente en el sector comercial e individual, que por el impacto del virus, se dificulta cumplir con los compromisos. Las medidas no se verán reflejadas en el récord crediticio de los deudores.

Amauri Castillo, superintendente de Bancos, manifestó a La Estrella de Panamá, que estas acciones son posibles gracias a la liquidez y solvencia con la que cuenta la banca, sin necesidad de poner en riesgo a los depositantes.

“Los bancos tienen la disposición y la disponibilidad de llegar acuerdos, se liberó la prohibición del uso de provisión dinámica, que se construye en épocas de economía y crecimiento económico más acentuado. En consecuencia, lo que hacemos es que los fondos de los bancos, que ya están contabilizados como parte de su patrimonio, se pueden utilizar para aliviar a empresas y personas que tienen deudas”, manifestó Castillo en conferencia de prensa en horas de la tarde de ayer.

VENCER LA INCERTIDUMBRE
René Quevedo, consultor empresarial, ha efectuado un análisis de los posibles escenarios del impacto del virus en Panamá.

Explica que en los próximos 4 meses el principal impulsor de la demanda interna será la confianza, y subraya la palabra. Los despidos y la caída confianza del consumidor causará un menor consumo en los hogares, y como consecuencia, una menor confianza empresarial generará una disminución del consumo en los hogares y menor inversión.

Los sectores que aportan el 59% del empleo se verán afectados, entre ellos el comercio al detal, logística y transporte, hoteles y restaurantes, industria, servicios administrativos y de apoyo, actividades financieras y de seguros (ver tabla).

Quevedo opina que “al margen de las acciones que implemente el gobierno, lo primero que hay que hacer es estimular la demanda de bienes y servicios ante la inminente caída del consumo y actividad comercial en los próximos meses”.

PROPUESTAS
Quevedo propuso crear un Consejo Público-Privado para la planificación y seguimiento de las medidas de impacto, para la reactivación económica y generación de empleo.

Otra forma de reactivar la economía es poner en marcha los proyectos de infraestructura que ya han sido programados en el presupuesto nacional como el Cuarto Puente sobre el Canal, la línea 3 del metro, la ampliación de autopistas, y obras viales en Panamá y el interior.

“Como aspectos negativos, es previsible un aumento de la desocupación de la población joven y el agravamiento de la delincuencia, en un país que ya vive la más alta tasa de desempleo juvenil y peor explosión delictiva de su historia”, puntualizó el consultor.

No hay comentarios

Publicar un comentario