La estrategia electoral para convencer a las minorías

La mayoría de los afroamericanos se identifica con el demócrata Joe Biden, mientras que Donald Trump aplicará un plan para enamorar a los hispanos

Los dos partidos mayoritarios de Estados Unidos, el Republicano y el Demócrata, conocen la importancia que tiene el voto de los hispanos y afroamericanos. El análisis del comportamiento de estos grupos requiere de un conocimiento muy detallado sobre la situación demográfica del país y de sus intereses, para lograr inclinar la balanza hacia el color rojo o azul, el próximo 3 de noviembre.

Bradley Jones, investigador asociado en Pew Research Center –donde trabaja principalmente en la opinión pública estadounidense sobre política–, está muy consciente de que la raza, la cultura y la migración son factores que inciden en el comportamiento de los votantes.



Bradley Stonecash es el nombre del experto en encuestas políticas.


Los demócratas cuentan con un apoyo mayoritario de los hispanos en comparación con el Republicano (ver tabla).

Para enamorar a este público, los gobernantes que buscan la reelección dictan políticas que les favorezcan. En este orden de ideas, es probable que el republicano Donald Trump nombre a la cubanoestadounidense Bárbara Lagoa, en reemplazo de la fallecida jueza Ruth Bader Ginsburg, en la Corte Suprema de Estados Unidos.

A pesar de la protesta de los demócratas que solicitaron se deje la vacante hasta después de las elecciones, es una apuesta de Trump para conquistar a los hispanos, no solo de Florida de donde es oriunda la candidata, un estado con 29 votos electorales.

Los afroamericanos, por su parte, tienen una relación histórica con los demócratas. Este sector se inclina en un 83% por el partido azul. Tal vez una tendencia difícil de revertir sustancialmente luego de las protestas registradas por el abuso policial hacia los afroamericanos.

Es tal la polarización que se vive en Estados Unidos, asegura Jeffrey M. Stonecash, experto en política partidaria, que quien quiere saber de Joe Biden, candidato demócrata, solo tiene que mirar las noticias de CNN y CNBC, mientras que los simpatizantes de Trump cambian a Fox News.

Ambos lados provocan enfrentamientos en temas como los mencionados. Ambos partidos consideran que si gana su contrincante, puede poner en riesgo la democracia de ese país.

El racismo ha dividido casi irreconciliablemente a los estadounidenses, a juicio de Stonecash. Explicó que los republicanos miran muy distinto a los demócratas el tema del racismo. Para los primeros, no hay tal división, a pesar de que la mayor parte de la población blanca está con Trump. En cambio los demócratas, que tienden a ser más liberales, son más empáticos con el tema migratorio, no se sienten amenazados con el arribo de quienes buscan el famoso ‘sueño americano’.

“Hay diferencias fundamentales de lo que significa América. Los liberales piensan que es para todo aquel que tiene el anhelo de migrar a Estados Unidos, trabajar y triunfar. Esta no es la idea de los republicanos”, describió Stonecash.

El investigador Jones explicó el mecanismo que aplica en las encuestas. Ante todo solicita al participante revelar si está o no afiliado a algún partido. A quienes responden negativo, les preguntan si son más afines a uno u otro grupo. El 90% de los preguntados dijo sentirse cerca de uno de ellos. Un dato curioso es que a pesar de los sucesos ocurridos durante el periodo de Trump, el proceso de destitución, la pandemia y las manifestaciones recientes, los encuestados afiliados a partidos políticos no piensan cambiar de lado.

Todo esto se conjuga con la capacidad de los candidatos en llevar un mensaje al electorado. Para ello, las campañas se esfuerzan en influir dentro de sus estados y en recolectar dinero. “En Estados Unidos recogen mucho dinero de particulares. Trump ha colectado un billón de dólares, cifra similar a la de Biden”, indicó Stonecash.

Jones realiza encuestas desde 1994, datos que compartió con los periodistas que participan en el tour virtual de las elecciones de Estados Unidos organizado por el Departamento de Estado de este país. En la charla hizo una descripción general de las estadísticas demográficas y las tendencias del electorado de EE.UU. Factores como raza, etnia, género, divisiones generacionales y diferencias regionales que pueden influir en los resultados de las elecciones presidenciales.

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