Según la DEA le apodaban el Padrino, o Zepeda, y se encargaba de otorgar protección a un grupo criminal del estado de Nayarit, México
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México, publicó una nota suscrita por Timothy Shea, del Departamento de Justicia sobre la investigación del general Salvador Cienfuegos-Zepeda exsecretario de Defensa, a quien la Procuraduría General de la República de México, le desestimó todos los cargos luego de haber sido extraditado de Estados Unidos, donde fue imputado por cuatro cargos relacionados al tráfico de drogas.
En la carta se pretende ofrecer información adicional con respecto a la reciente investigación en contra del militar que originó su arresto en el estado de Los Ángeles el pasado 17 de octubre.
De igual forma, el Departamento de Justicia se pone a las órdenes de sus homólogos mexicanos para seguir trabajando en cualquier movimiento futuro necesario.
“Mientras que Cienfuegos fue imputado en Estados Unidos por crímenes relacionados al tráfico de narcóticos, nunca ha sido un objetivo directo de la agencia DEA. La DEA descubrió información que reflejaba su actividad criminal en el curso de la investigación a dos objetivos importantes de forma separada, y adquirió la evidencia que desencadenó en su persecución”, se lee.
En dicha investigación, la DEA no se enfocó en otro oficial militar directamente, así como tampoco condujo operativos de supervisión o investigación en contra de Cienfuegos dentro de México, de igual forma no tomó acción para influenciar al militar en su viaje a Estados Unidos que terminó con su detención, se lee en la misiva.
El documento explica que la pesquisa continuó en 2015 cuando la DEA logró hacer una conexión entre la investigación que se efectuaba en Estados Unidos y los Patrón-Sánchez.
A continuación, cita que “la DEA inició una investigación en 2013 apuntando a Las Vegas, Nevada, basada en la venta de heroína, cuyos distribuidores supuestamente eran suplidos por la organización de Juan Francisco Patrón-Sánchez, basado en Nayarit, México. La investigación se efectuó bajo la autorización de la corte que dio luz verde a interceptaciones de aparatos de comunicación de los miembros encargados de la distribución en Las Vegas”.
El documento explica que la pesquisa continuó en 2015 cuando la DEA logró hacer una conexión entre la investigación que se efectuaba en Estados Unidos y los Patrón-Sánchez. Luego se presentó la evidencia al procurador del Distrito Este de Nueva York quien autorizó la investigación y el proceso judicial. En 2016, la DEA obtuvo las interceptaciones efectuadas a Daniel Silva. No hubo escuchas dentro de territorio mexicano, según la nota. Estas interceptaciones en territorio norteamericano eran entre Silva y Patrón, sobre un individuo que después fue identificado como el secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos.
La DEA no investigó al militar como objetivo principal y tampoco interceptó sus comunicaciones directamente. Fue imputado como coconspirador una vez que fue identificado en las evidencias de las interceptaciones que surgieron entre ambos sujetos mencionados.
Estas pruebas incluyeron referencias bajo el nombre de el “padrino” y Zepeda, considerados como sobrenombres de Cienfuegos-Zepeda. La evidencia también contenía fotos de pantalla de las comunicaciones efectuadas con el militar sobre las reuniones que había entre la DEA y los oficiales mexicanos, la contraparte, en relación con las investigaciones que se estaban llevando a cabo sobre el grupo de Patrón-Sánchez. Lo que determinó la pesquisa es que el alto mando del ejército proporcionaba protección al grupo organizado.
La DEA no investigó al militar como objetivo principal y tampoco interceptó sus comunicaciones directamente. Fue imputado como coconspirador una vez que fue identificado en las evidencias de las interceptaciones que surgieron entre ambos sujetos mencionados.
En 2019 la investigación fue presentada ante la Corte Suprema del estado de NY, que imputó con cuatro cargos a Cienfuegos el 14 de agosto de ese año, por su rol en el esquema de tráfico e importación de estupefacientes: producción, importación, distribución de heroína, cocaína, metanfetaminas y mariguana, y por blanqueo de capitales.
En resumen, la DEA reveló que mientras fungía como Secretario de Defensa Nacional en México, Cienfuegos protegía al grupo criminal en sus acciones ilegales y violentas. La evidencia mostrará que recibió coimas de los mencionados a cambio de protección, tráfico seguro de narcóticos y armas, además de información sobre las operaciones a cargo del ejército mexicano.
Esta evidencia se concentra en las grabaciones de las comunicaciones, que además incluyen decomisos de droga y testimonios que dieron detalles sobre las actividades ilegales de los Patrón-Sánchez. Con la carta, el Departamento de Justicia anexa las evidencias y el indictment contra Cienfuegos. De igual forma indica que pretenden ampliar la investigación y para ello buscan consultar al gobierno de México al respecto.
La DEA reveló que mientras fungía como Secretario de Defensa Nacional en México, Cienfuegos protegía al grupo criminal en sus acciones ilegales y violentas.
No obstante la nota publicada hoy por la SER de México en la que se narra una explicación del por qué fue detenido el alto mando, el 17 de noviembre, el caso dio un giro inesperado cuando las autoridades estadounidenses desecharon los cargos en su contra para que pueda ser juzgado en México.
Este 13 de enero, la Fiscalía de México desestimó el caso contra el exsecretario de Defensa por falta de pruebas.
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