Minseg apuesta a la inteligencia artificial como herramienta para combatir la delincuencia

El ministro de Seguridad, Juan Pino, reveló que pondrá en marcha del Sistema de Verificación Ciudadana que cuenta con lectura facial  sin necesidad de intervención policial, estrategia que pretende bajar los índices delictivos

Juan Pino.

El Ministerio de Seguridad apuesta a la inteligencia artificial como herramienta para combatir la delincuencia, especialmente delitos de alto impacto, como robos y hurtos. Según cifras proporcionadas por el ministro Juan Pino, hasta el 30 de junio hubo 2,521 robos que, aunque en comparación a otros años muestran una ligera disminución, es conocido un alto porcentaje de estos delitos que no se denuncian. Pino está a punto de implementar el Sistema de Verificación Ciudadana mediante el cual el agente del orden público podrá conocer con su celular datos como la placa del auto, número de cédula y lectura facial del presunto delincuente sin necesidad de una intervención directa con el ciudadano. Un plan que pretende poner en marcha este año con el propósito de contar con una reacción más inmediata de la policía en cualquier incidente.

Panamá enfrenta uno de los escenarios más complejos para combatir el crimen y garantizar la paz social. Antes de la pandemia el país registró el mayor nivel de desempleo juvenil, 14 mil adolescentes que abandonaron la escuela y la peor explosión delictiva. Pero el Covid empeoró aún más esta situación dejando un desempleo del 18% y la informalidad en casi 700 mil personas. Un caldo de cultivo que despierta al crimen, que no se combate con un policía en cada esquina, sino mejorando la calidad de vida de los ciudadanos, lo que representa un reto a largo plazo.

¿Qué enfoque tiene planeado el Ministerio de Seguridad para hacer frente a la realidad que vive el país, sumergido en un alto índice de desempleo y crisis económica?
Los índices de deserción escolar, sumado al desempleo y la informalidad en la calle como consecuencia de la pandemia, sumado a que los estudiantes no están en la escuela, siempre existe la probabilidad de que los jóvenes sean carne de cañón para el crimen organizado cuando el estado no puede dar respuestas. El crimen organizado va a aprovechar esta oportunidad para reclutar a estos jóvenes. Nos ha tocado un momento de pandemia bien difícil, donde no solamente estamos en el escenario normal al que se dedicaban las fuerzas de seguridad, sino que ahora estamos en otros escenarios como la migración irregular, el apoyo a Panamá Solidario, la Fuerza de Tarea Covid en la que aportamos apoyo a la trazabilidad, también apoyamos al Ministerio de Educación (Meduca) para reparar las escuelas. El Minseg tiene que apoyar y ver como salimos de la pandemia y trabajar en equipo como dice el presidente Laurentino Cortizo. Hemos tenido que ingeniárnosla en la parte económica. Nos ha afectado en todo lo que es inversión y compras, hemos tenido recortes presupuestarios que nos ha obligado a ajustarnos para mantener la estabilidad. Pero lo mejor que tiene el Minseg es su componente humano.

Tenemos el Centro de Operación Nacional, queremos tener una ciudad con inteligencia artificial.

¿Pero cuál sería la estrategia ministro?
Primeramente, tenemos el Centro de Operación Nacional, queremos tener una ciudad con inteligencia artificial. Usted sabe que en pandemia el centro prácticamente estaba sin funciones. Nosotros ideamos con un recurso humano calificado y lo pusimos a trabajar con inteligencia artificial en Colón y Panamá para cuidar las ciudades. Vamos a tener también el Sistema de Verificación Ciudadana, un sistema en el que el Policía a través del celular puede tener lectura de placa, de documentos, lectura facial, sin necesidad de una intervención directa con el ciudadano. Esa va a ser una estrategia muy importante que vamos a tener.

¿Esos son planes a largo plazo?
No, eso es este año. Nosotros estamos activando todos los proyectos de la Policía Nacional y la Fuerza Pública en cuanto a prevención. Ya la policía esta en ejecución y estamos a punto de terminar una vacunación masiva y vamos a aplicar los planes de prevención porque hemos tenido un alza de robos y hurtos especialmente en la ciudad de Panamá y La Chorrera.

¿Qué eficacia van a tener estos programas para prevenir los robos y hurtos a pesar de que el origen del delito no se ataca, que es el desempleo y el bienestar del ciudadano?
Claro, toda la razón. El gobierno lo está haciendo. Panamá va a ser uno de los primeros países que tendrá una recuperación económica rápida, pero mientras no vacunemos al menos a un 70% u 80% de la población este año, no vamos a tener una recuperación económica rápida, una cosa va de la mano de la otra. Al haber menos trabajo va a haber más problemas en la calle. Nos toca a nosotros hacer nuestro rol de la seguridad ciudadana, por lo que activamos nuestros planes preventivos al igual que el Centro de Operaciones para que la ciudadanía pueda llamar y reportar los delitos porque sí hacía falta esa confianza con la ciudadanía de llamar y atender inmediatamente las llamadas. Ese es el rol del Minseg, represión y prevención, ahora queremos apostar a la segunda. Con los jóvenes, por ejemplo, tenemos todo para trabajar con ellos en Colón, pero el Ministerio de Salud nos ha dicho que no podemos iniciar el Mundial del Barrio porque tenemos una alta tasa de contagios por Covid. Hace poco hablé con el ministro de Salud y me dijo que hay que esperar al menos tres semanas. Para mí trabajar con al menos 500 jóvenes en Colón es fantástico porque el joven escucha y los planes deportivos van acompañados de una ayuda psicosocial para conducir al joven por el buen camino. La represión va de la mano, pero vamos a activar la prevención.

Nos toca a nosotros hacer nuestro rol de la seguridad ciudadana, por lo que activamos nuestros planes preventivos al igual que el Centro de Operaciones para que la ciudadanía pueda llamar y reportar los delitos porque sí hacía falta esa confianza con la ciudadanía de llamar y atender inmediatamente las llamadas.

Colón es la ciudad más vigilada del país, pero las cámaras no evitan que surjan los crímenes, estos elementos técnicos que menciona se incorporarán, ¿qué eficacia van a tener y a base de qué se planearon?
Si se recuerda el año pasado tuvimos un alza de la criminalidad en el proyecto Alto de los Lagos en Colón, nosotros solicitamos una reunión de inmediato con la gobernadora para poder intervenir con el plan de seguridad ciudadana. Entrar a Colón no es fácil, hay que trabajar con los colonenses. En Altos de Colón se sumaron los líderes del área, la junta técnica y entramos con todo a través de la Policía Comunitaria para controlar y trabajar en el plan de seguridad ciudadana que implementa el Minseg. Este plan es efectivo si se trabaja con los líderes comunales y los representantes de corregimiento. Unilateralmente no va a ser efectivo, yo puedo ofrecer lo que sea, pero si ellos no están convencidos de que eso funciona, no se suman. En esa experiencia resultó, y bajamos el índice de la criminalidad, trabajamos con la comunidad, con los jóvenes y vea ahora como está controlado. Posteriormente hubo que hablar con todos los representantes para llevar el plan a todos los corregimientos para sumarse a este esfuerzo. Como siempre, al principio hubo que dar muchas explicaciones y las dimos y ofrecimos en plan para Colón que está en ejecución actualmente. Se hacen reuniones locales para conocer las necesidades de la población y elevamos las solicitudes a través del Ministerio de Desarrollo (Mides) u otros para buscar solución. Como unidades de seguridad trabajamos con esos jóvenes y les damos seguimiento.

Colón parece una bomba de tiempo, los índices de desempleo son altos, hay falta de oportunidades, hay muchos negocios que cerrarán sus puertas, no sé qué tan rápida sea la reacción del gobierno para poder controlar lo que sucede en Colón...
La preventiva. Hay un comité a través del Mides con el Meduca en el que se está trabajando en Colón en estas comunidades. Sabemos que Colón es una bomba de tiempo, es un problema radical, porque los jóvenes de las 16 cuadras, si les preguntas a ellos nunca han salido de esas calles. No han tenido esa oportunidad, y lo que ven allá son malos ejemplos. Aparte del desempleo y educación, se suma algo a Colón, es una de las provincias que hemos evaluado que tiene el índice más alto de hogares disfuncionales. Esos jóvenes se crían solamente con su mamá o papa, la mayoría es con la mamá, el papá no existe. Especialmente en lo que es esas 16 calles. Paralelamente en la parte preventiva, hemos trabajado en la parte represiva en contra de las organizaciones que envían droga a través de los puertos que tenemos en Colón. Hasta hemos llegado a los operarios de los puertos que facilitaban el tráfico de droga. Es un gran trabajo de represión que estamos haciendo con el Ministerio Público porque la droga es uno de los grandes problemas que tenemos en Colón.

La droga que viene proveniente del Caribe colombiano hacia esa ruta de San Blas que llega a Colón es una droga de alto perfil, es decir, de grandes cantidades porque se han abierto nuevos mercados de droga, no solo el mercado estadounidense, sino el europeo.

Los fiscales de drogas han manifestado estar muy preocupados por la penetración del narco en los puertos. Las empresas operadoras alegan que se trata de una labor de las autoridades de seguridad detectar a estas personas, explíqueme ¿qué está pasando?
La droga que viene proveniente del Caribe colombiano hacia esa ruta de San Blas que llega a Colón es una droga de alto perfil, es decir, de grandes cantidades porque se han abierto nuevos mercados de droga, no solo el mercado estadounidense, sino el europeo. Aprovechan ese trampolín de los puertos del Caribe para enviar esa droga a otras latitudes. Las organizaciones criminales tienen un alcance económico inimaginable por su poder, compran conciencias, es el negocio redondo, no es fácil. Que utilizan nuestros puertos, lo hacen, que los operarios participan, sí participan porque así lo hemos visto en nuestras operaciones. Judicializar a estas organizaciones criminales no es fácil a pesar de que este año hemos duplicado las operaciones contra el crimen organizado, las operaciones antipandillas, por eso digo que los resultados operacionales que vamos a tener este año van a ser el doble. Sabemos que la droga viene de Colombia donde tienen cultivos, reserva de droga por la saturación que hay para el envío y obviamente sabemos que Panamá es un sitio de llegada de la droga, en cierto momento estas organizaciones usaron a Colón para llevar este trasiego de droga. Al final estas bandas organizadas terminan peleándose el reinado de quien manda y terminan liquidándose entre ellos.

Habla sobre la situación de las pandillas de Colón que se pelean el territorio para enviar la droga a Europa, pero las empresas parecen relegar en Aduanas y la Policía el trabajo de detectar a los integrantes de las pandillas, ¿qué tiene que decir al respecto?
Yo pienso que es un doble compromiso porque la mayoría de los puertos en el Caribe no tienen escáneres para poder controlar y monitorear lo que entra y sale de los puertos. Esa es una debilidad grande que tenemos en los puertos del Caribe. La política del Minseg es no dialogar, no doblegarnos ante estas organizaciones criminales, ante estos narcotraficantes que lo que buscan es su negocio para lavar su dinero. Este año los resultados, como lo ha dicho la fiscalía de drogas, han sido duplicados en cuanto a confiscaciones en Colón, eso no es normal, eso quiere decir que el trabajo que está haciendo el Ministerio Público junto a la Policía es transparente y mancomunado, caiga quien caiga. Además, hemos redoblado la cantidad de personas, apoyados con Senan y Senafront, en costa abajo y costa arriba vamos a poner más cámaras, pero sí les pedimos a los puertos su colaboración porque ellos pueden apoyar con la instalación de escáneres para monitorear la entrada y salida. Aparte de esto, lo que terminaría de cerrar el círculo sería la aprobación de la ley de extinción de dominio que está en la Asamblea Legislativa, porque muchas veces uno pone al criminal bajo resguardo legal, pero no le afecta los bienes. Esta ley va directamente contra los bienes ilícitos. Es por tercera ocasión que el estado lleva a la Asamblea el proyecto, antes lo hizo en el 2014 y 2015.

¿El Minseg se encuentra preparado, o cómo podría atender un escalamiento de conflictividad social en el país?
Nosotros lo hemos manejado y estamos preparados para ese escenario. En el mes de abril el orden público se nos disparó. Aquí el Minseg o las fuerzas públicas quiere enfrentamientos con el pueblo. Sabemos que son momentos anormales en los que la gente clama por comida, por bonos, por agua y cuando sucede en estos casos, la fuerza pública es un mediador, se comunica con el ministerio en cuestión. Ya en situaciones que se escapan de la mano, en las que no existe ni ley ni orden, ya sería otra cosa. Nosotros hemos manejado esta situación en el país, no queremos ningún conflicto social, y estamos haciendo todo lo necesario a través de Panamá Solidario, los bonos, llevando la comida a zonas de difícil acceso. Muchos ponen esa palabra, la cual no estoy de acuerdo que, porque sucedió en Colombia por una situación especial, o en Costa Rica, tenga que pasar aquí. Muchos la llaman, pero ese llamado es innecesario. Quiero que la comunidad panameña sienta el respaldo del Minseg y no queremos una situación como esa.

¿De la droga que entra a Panamá, qué porcentaje se queda en el país y cuánta es la que sigue?
Le voy a explicar la estrategia de Panamá. Consiste en que los narcotraficantes elijan otra ruta y lo estamos logrando. Hay un informe anual que hace el Centro Inter agencial Antidroga de Cayo Hueso donde Panamá tiene un agente permanente. Este año terminamos en tercero y cuarto lugar como llegada de la droga y paso hacia el norte porque en 2015, 2014 y 2013 Panamá era el primer lugar. Estamos obligando a los narcotraficantes a usar otras rutas porque la droga hace mucho daño. La droga no la puede erradicar Colombia por más apoyo que ha tenido de Estados Unidos. Ahora prohibieron la erradicación aérea, así que se está haciendo manualmente, imagine el gran problema. Si le digo, de las 67 toneladas que llevamos hasta la fecha, que han sido en tierra firme, pegadas a la costa, en caletos, yo puedo decir que la mitad de esta droga iba a terminar en algún lugar en tierra firme de nuestro país, ya sea en algún puerto, en un fondeadero, pero la mitad iba a quedar aquí para después ser reenviada a otros lugares.

El consumo local ha ido en aumento y nadie parece darse cuenta de eso...
El consumo ha aumentado especialmente en los jóvenes, lo vemos en las grandes incautaciones de mariguana que se están haciendo. Por eso tenemos las operaciones de compra controlada, pero sí hay un aumento en el consumo de droga en los jóvenes.

Pero hay instituciones fundadas para prevenir el consumo, Conapred por ejemplo, ¿qué pasa que se perciben prácticamente inmóviles?
Con Conapred tuvimos una reunión con el procurador encargado. Hablamos para activar Conapred, hay una intención muy positiva, hay hasta fondos en Conapred y no se están utilizando. Programamos una segunda reunión porque sí hay que activar Conapred. Todas las personas deben tener su rol y responsabilidad.

¿Cuáles son las cifras que manejan de robo y hurto? Y, ¿qué están haciendo para recuperar la confianza de la ciudadanía para que denuncie y no se evidencien esos subregistros del crimen?
Yo tengo la última cifra actualizada. De los delitos de mayor impacto social son cinco: violencia doméstica; robos; hurto; lesiones personales y homicidios. En la primera sí ha aumentado. Este año estamos por encima de 2020 y 2019, eso lo atribuimos mucho a la ingesta de alcohol, la apertura y la falta de control de los padres hacia sus hijos como lo controlaban a uno antes con una mirada. Los robos hemos tenido una ligera baja con relación a 2020, son 2,521 hasta el 30 de junio los robos que se han registrado en comparación con 2695 para la misma fecha. En 2019 fueron 3800 robos.

Pero hay un subregistro que no estamos tomando en cuenta, y que tal vez esté engañando la cifra...
Para eso hemos creado la plataforma de Crime Stopers y el 104 que recibe 6 mil y 8 mil llamadas. Ya la ciudadanía empieza a llamar y tener la confianza en la Policía, eso nos está ayudando.

De los delitos de mayor impacto social son cinco: violencia doméstica; robos; hurto; lesiones personales y homicidios. En la primera sí ha aumentado.

¿Qué cree que cambió para que la ciudadanía denuncie más el delito?
Yo creo que ven un equipo. Siempre trato de ir a todos los lugares, es un trabajo de equipo, tengo buenos directores de los estamentos de seguridad, no descansamos, trabajamos todos los días y buscamos alternativas.

Abril había sido el peor mes del año en cuanto a homicidios, hubo 50, pero en junio se registraron 52 ¿qué está pasando?
El 75% o 80% de los homicidios son por rencillas de organizaciones criminales. En estos días saqué la estadística, había 250 homicidios, ¿en cuántos hay un daño colateral? No llegaba ni a 10 personas, la mayoría pertenecen directa o indirectamente, o obedecen a una organización criminal. Los daños colaterales son muy pocos. Este mes de julio llevamos 11 homicidios (hasta el 16 de julio). Hubo problemas en Panamá Oeste, lo atendimos, hubo un frente en San Miguelito y por eso vamos a activar los frentes de seguridad ciudadana y atender la situación.

¿Qué tiene que decir sobre la alerta impuesta por Estados Unidos en el sentido de que Panamá es un país peligroso y pide a sus ciudadanos no viajar?
Mire, ese día fui con el señor encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos al Darién, y estuvimos en Bajo Chiquito, en Metetí, en San Vicente, y él fue conmigo sin seguridad. La alerta que puede haber, según analizo yo, en el Golfo de los Mosquitos de repente por el tráfico de drogas que pasa por ahí, porque el índice criminal en Bocas del Toro es bajísimo, nada más tenemos 4 casos en lo que va del año. Lo único que veo es un lugar fronterizo y tráfico marítimo de drogas, pero en Darién también es muy bajo. Hemos tenido seis casos en lo que va del año y la mayoría por riñas y peleas familiares. El escenario que tenemos en Darién es el humanitario de paso de migrantes.

No veo razón, me duele, y no veo razón de por qué tratan así a Panamá, porque está haciendo grandes esfuerzos, es cooperador, humanitario y esto nos afecta.

¿Cuál es el plan con los migrantes? ¿Vemos que algunos están afianzándose en el país? ¿Cuál es la visión que tienen ustedes con respecto a ese tema?
Nosotros ya habíamos vaticinado que este fenómeno venía antes de terminar la pandemia y pos pandemia porque los países no van a quedar igual económicamente, además del cambio de política en Estados Unidos. Colombia nos abrió sus fronteras y nosotros estamos dando un trato especial a los migrantes, pero cuido que esos migrantes no estén en nuestra ciudad por temas de seguridad y de bioseguridad. Entonces yo fui el martes al Darién, me encontré con una familia de Angola, una viuda con sus hijos que no sabía ni qué hacer. Es un asunto de corte humanitario. Tenemos denuncias ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos porque tenemos que cumplir ciertos aspectos por temas humanitarios. Ahí lo que damos es atención medica con Médicos sin Fronteras porque este año ya pasamos las 36 mil personas que han pasado por Panamá. En este momento tenemos 2,400 personas. El jueves llegaron 465 migrantes de diferentes nacionalidades. Los migrantes están avanzando hacia el norte hacia Costa Rica que nos hemos reunido con nuestro homólogo y lo llevamos a Darién para que vea ese escenario que tenemos. Nosotros hacemos la verificación a todos los que llegan, porque hemos encontrado alerta de terrorista en los que han pasado y Panamá es el único país que hace esto. Yo le he dicho a los norteamericanos que el triángulo norte no funciona, el triángulo Sur (Panamá-Costa Rica y Colombia) sí funciona con el apoyo de ellos. Les pedimos que hagan ese esfuerzo para apoyarnos, las cosas tienen que mejorar.