Deponer intereses para llegar a consensos que trasciendan administraciones, es uno de los desafíos de la presente administración en la retoma del diálogo por la Caja de Seguro Social. La presidenta de la Junta Directiva, Aida Michelle Maduro explica qué sigue luego del informe de la Organización Internacional de Trabajo
El desafío de la Caja de Seguro Social es compaginar diferentes voluntades e intereses. Pasar de la teoría a la acción en plazos definidos y concretos. Después de recibir el informe de la Organización Internacional de Trabajo (OIT) hay que poner las manos a la obra para evitar una crisis económica desproporcionada en el 2024, fecha en que queda sin fondos el programa de retiro de Invalidez, Vejez y Muerte, con consecuencias de igual dimensión. Para ello se pueden aplicar innovadoras fórmulas que no necesariamente impliquen un golpe abrupto en la edad de jubilación o el aporte de las cuotas obrero-patronales. Pero se tiene que llegar a consensos entre los participantes del Diálogo Nacional convocado previamente, y que suspendió hasta tener el informe de la OIT. Nuestra invitada, Aida Michelle Maduro, presidenta de la Junta Directiva de la CSS, habla de un proceso clave para lograr consensos: deponer intereses y trazar una hoja de ruta que no quede en un documento sin ejecutar. Hace falta voluntad, dejar los procesos burocráticos y digitalizar toda la institución. Pareciera un chiste de mal gusto que en plena era tecnológica los programas de la entidad no se comuniquen entre sí después de haber invertido millones de dólares.
¿Se discutió elc informe de la OIT en la Junta Directiva de la CSS?
Fue presentado. No se ha discutido a profundidad porque lo recibimos no a la misma velocidad que fue publicado en las redes de la entidad, lo cual está bien. Es un documento que debe ser abierto porque es lo que se estaba esperando. Ahora bien, el propio informe fue solicitado por los trabajadores y por la plenaria de la Mesa del Diálogo. Para términos de la JD es un insumo, no de deliberaciones, pero puede ayudar a las decisiones que debe tomar en 90 días después de presentado, para hacer las recomendaciones que deberían llevarse adelante en términos de la sostenibilidad del subsistema de IVM. Creo que el documento ha sido oportuno en cuanto al sustento técnico que tiene. Sus recomendaciones fueron muy amplias, no tiene una acción específica y eso era de esperar porque el país tiene que tomar sus propias decisiones basado en nuestra realidad. Estudios ya tenemos suficientes.
Pareciera un chiste de mal gusto que en plena era tecnológica los programas de la entidad no se comuniquen entre sí después de haber invertido millones de dólares.
¿Se solicitó a la OIT que se hiciera un informe sin recomendar medidas paramétricas ante la posición pública del mandatario Laurentino Cortizo manifestó que no se tomaría en cuenta esta fórmula para reflotar el IVM?
No. El informe a la OIT que firmamos como testigos, tanto el director general de la CSS (Enrique Lau), como mi persona, es realmente presentar una imagen de acuerdo con la información actuarial y financiera que se suministró a la OIT. No era con ninguna restricción. Se pidió que dieran sus observaciones.
¿Por qué no recomendaron medidas paramétricas como una fórmula para nutrir el IVM?
En el 2024 no tendría más fondos el IVM si no se hace nada. Por eso es la urgencia de que tenemos que tomar acciones ya. No lo podemos dejar como han salido algunos a decir que sentarán las bases para el próximo gobierno. Ese tema no es nuevo. La situación del IVM se ha presentado desde inicios del 2000. Aún con las reformas en el 2005 hubo la advertencia de que debían hacerse nuevas modificaciones más allá de 10 años.
¿Qué va a pasar ahora? ¿cómo se va a manejar el informe y hacer consensos?
Como el informe fue solicitado por la Mesa de Diálogo Nacional de la CSS esa misma mesa es la que debe empezar a desmenuzar el informe. Se quedaron pendientes dos temas en la mesa y que deben tener conclusión: la inclusión de los informales y el tema del IVM. Son dos tópicos cruciales que, en este momento, más que en otro de la historia, son más cruciales por los índices de desempleo y la informalidad. Además, el tema de pensiones tiene que ser atractivo para que los informales quieran incorporarse al sistema por los beneficios que va a tener en prestación social para cada uno de los contribuyentes.
La situación del IVM se ha presentado desde inicios del 2000. Aún con las reformas en el 2005 hubo la advertencia de que debían hacerse nuevas modificaciones más allá de 10 años.
Hay sectores que se levantaron de la Mesa del Diálogo, ¿cómo se va a incluir a estos grupos?
Creo que la mesa siempre ha sido incluyente, se retiraron los grupos no porque no hayan tenido un espacio ahí. Todos tenemos que buscar una solución que es para la institución más que de forma. Lo que necesitamos es entender que todos los que participen en el diálogo buscando los mejores intereses para la CSS deben entrar con ese pensamiento. Que no continuemos en un tema de los intereses individuales de los grupos representados.
Es casi imposible…
Estoy clara que estoy hablando de un sueño, pero me encantaría que eso no sucediera porque lo importante es que tengamos una solución para nuestra institución que es de todos los panameños y de la cual depende mucho el bienestar de los contribuyentes.
Creo que la mesa siempre ha sido incluyente, se retiraron los grupos no porque no hayan tenido un espacio ahí.
Reducir el número de participantes de la mesa, ¿agilizaría las discusiones y la toma de decisiones?
Tengo que decir que, de manera lógica, sin que se interprete como una opinión al respecto, usualmente mientras menos personas participen es más ágil llegar a acuerdos. Sin embargo, como esto es un tema de toda la población y que es un compromiso a corto, mediano y largo plazo, tendríamos que abocarnos porque sea incluyente y parejo. Es decir, si vas a tener 10 representantes de empleadores debe haber la misma cantidad del gobierno y de los trabajadores. Cuando hablamos de institución no podemos pensar que es una lucha de clases, no es una lucha de poderes, la única visión que tiene que primar para el aporte de ideas en busca de la sostenibilidad de la institución es que todos somos panameños y que siga adelante. Si lo vemos en luchas de clases tendemos a equivocarnos y no aportamos soluciones.
¿Cuándo se va a iniciar la discusión en el Diálogo?
Apenas hagan el llamado. La decisión de la suspensión del diálogo hasta que llegara el informe de la OIT, era esperar el informe. Tendría que pensar que el llamado tendría que venir del Ejecutivo quien dio las condiciones para que eso se efectuara.
Hay otras fórmulas que se pueden aplicar para evitar medidas paramétricas abruptas. Se pueden buscar otras actividades en la CSS que nutran de otras fuentes el IVM, ¿qué se ha planteado sobre eso?
Por supuesto que sí hay esa oportunidad de diversificar las inversiones que tiene la CSS en general. En temas de a dónde puede invertir, si en fideicomisos o en la bolsa, la ley limita mucho en qué invertir por la seguridad de esos fondos, la garantía que requieren. Pero la CSS, y específicamente propiedades que son del IVM, también se les puede sacar mejor producción a los terrenos, por ejemplo.
Pero no es suficiente para nutrir el IVM...
Por supuesto que no. Si vemos que el informe actuarial nos dice que son $3 mil millones que deben salir de algún otro lugar para compensar y sostener el fondo, tienes que cambiar cómo van a hacer esos aportes. Los que hay actualmente, de los trabajadores y empleadores, los del estado que se pusieron en $140 millones puede ser que en su momento fue adecuada, pero como se ha ido modificando la economía del país, debe adaptarse a esto.
Si la CSS busca otras fuentes de financiamiento, como convertirse en un banco, no puede ser manejada por los amigos de los políticos, ¿cómo se evita esto?
Otra vez, no puedo decir directamente sin tener la representación de la JD en su pleno, pero sí hay oportunidades que se pueden llevar adelante. El tema de que puede tornarse en un banco para préstamos y de más, es una idea potable, pero volvemos a las recomendaciones de la OIT sobre fortalecer las estructuras administrativas. Sino la solución será peor que la enfermedad. Debe ser muy bien planificado y no debe dejarse nada por fuera por evaluar porque al final de cuentas se han presentado estudios con las bases técnicas para llevarlo adelante, pero primero tenemos que hacer las modificaciones y armar la estructura estable para ofrecer esos servicios que le den un mejor rendimiento a la CSS.
¿Vamos a solucionar el problema del IVM antes de 2024 tomando en cuenta que se cruza un año electoral?
La respuesta es que tenemos que hacerlo. ¿Cómo? Es lo que vamos a ver. La solución no es hacer protestas en la calle, la invitación general es que aportemos a este tema para buscar una pronta solución del IVM que hay que solucionar. Aunque sean los primeros pininos para seguir trabajando.
¿Realmente no son necesarias las medidas paramétricas?
No podemos dejar nada afuera. Tenemos que evaluar, podríamos hacerlo de una manera gradual que no sea tan fuerte para todos. Si este tema lo hubiésemos tratado en el 2012 cuando había un crecimiento de dos cifras, no hubiera sido mayor drama hasta subir las cuotas. Pero ahora mismo, cuando la economía está tan deprimida, las paramétricas crean tanto escozor. Creo que se han presentado muchas obras de infraestructura que estaban incompletas y finalizaron, la propia Ciudad de la Salud, a pesar del costo, es un avance. Pero nos hemos concentrado en ver lo que está rezagado. Hay que hacer un balance, no podemos rechazar todo lo viejo y que quede como un lastre que estamos arrastrando. El tema de la Ciudad de la Salud, un ejemplo positivo, que con todo y sus costos está en operación ofreciendo un servicio a la población. También hay otros temas en los que hay que trabajar y hay que llevar a una conclusión. En los temas informáticos, por ejemplo, estamos hablando desde que se inició este periodo de gobierno sobre el tema, ni hablar de las (administraciones) anteriores, hicieron las mismas inversiones y los sistemas no se comunican uno con otro. Inversiones millonarias que al final los contribuyentes no podemos tener un informe de nuestras contribuciones al programa de IVM, por ejemplo. Es verdad es que ahora la información la proporcionan más rápido, pero cuando estamos en un mundo digitalizado, en el que se pueden hacer transacciones de todo tipo sin la necesidad de estar presente, nosotros no podemos ver cuánto hemos contribuido a pesar de que se pueden dar bonos solidarios por el número de cédula. Por eso es importante la voluntad. Si el mismo énfasis que puso el gobierno en la pandemia, la agilidad informática que se ha tratado de implementar para el tema de medicamentos, por qué no se aplica en los programas. Son temas que son a largo plazo. Eso significa que el software desarrollado se puede incorporar a otras instituciones.
La OIT también recomendó emparejar la edad de jubilación de las mujeres y los hombres, ¿qué se ha conversado al respecto?
Nada. Desde el punto de vista oficial nada porque hay opiniones encontradas sobre ese tema.
¿Es una alternativa?
Yo creo que nosotros podemos seguir trabajando después de la edad de jubilación. Hablo por mí, me faltan cuatro años para jubilarme, pero me siento con ganas de seguir trabajando, no de tejer, con todo respeto para quienes les gusta (risas).
¿Cuáles son los cambios administrativos que robustecerían la institución?
Tenemos que sentarnos a dialogar. Así como el tamaño de la institución, el presupuesto que maneja, se debe considerar modernizar.
¿Cómo no lo han hecho hasta ahora?
Faltan voluntades. Son voluntades de todas las partes. Se ha hecho crítico al pasar de los años porque no podemos seguir en esta institución, ni en el país, haciendo planes cada cinco años. Hay temas que requieren continuidad.
¿Dentro de la JD hay anuencia de que es casi imposible continuar con los parámetros administrativos actuales?
Hay una parte didáctica en la pregunta. La JD tiene el rol de fiscalización y llevar nuevas prácticas que sean presentadas por la administración. Pero la JD no tiene el poder para tomar las decisiones que se le están adjudicando. La ley es una cosa, pero cómo funcionan los roles y la facultad que brinda a la JD llevar esas decisiones, es diferente. La ley habla de que la JD es la máxima autoridad, pero no tiene iniciativas para hacerlo. Se deben presentar ideas, pero el personal idóneo o el conjunto no es suficiente.
Ni hablar de la cantidad de gente que hay en la JD, once principales y suplentes…
La propia JD tiene una composición muy variada, tiene once representantes y suplentes que tienen voz, aunque el voto es del principal cuando está presente. Pero es más allá del tema de cómo manejar la JD, porque es el menor de los problemas porque si quisiese que esa fuera una decisión, puedes eliminar la JD, pero hay que preguntarse si ayuda al problema. La razón de la creación de la JD es tener un rol colegiado basado en la misma idea tripartita para tomar decisiones.
Pero parece que la misma institución pide a gritos una modernización y no ocurre…
No ocurre. Yo siento que el llamado es a una acción. Si se requiere un replanteamiento de la institución, hay muchos expertos que pueden aportar. Lo que se pueda dar en términos de iniciativas, ya que tenemos todos los estudios, ahora se requieren acciones. Por eso he hecho mucho énfasis en el tema de los procedimientos. Tal vez no sean la decisión, pero debe servir en la medida que se ayude para que se puedan tomar decisiones y puedas ver un resultado de las decisiones que se toman. Sabes cuántos traslados de partidas, de nuevas inversiones en infraestructura, de nuevos sistemas informáticos, todo se presenta y se atiende cualquier cantidad. Pero sería bueno para la población que los temas aprobados en la JD terminen en una ejecución.
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